hola

miércoles, 20 de junio de 2012

CANTO RÍO CON TUS AGUAS

Si tuviéramos que definir el día de hoy con una palabra esa sería EMOCIÓN. Nos hemos emocionado con la actuación, en la que habéis estado geniales, y nos hemos emocionado con la despedida. Expresar nuestras emociones y sentimientos es algo bonito y necesario. Ved como lo explica nuestro gran poeta Rafael Alberti en este precioso poema.
CANTO RÍO CON TUS AGUAS
Canto, río, con tus aguas:
De piedra, los que no lloran.
De piedra, los que no lloran.                              
De piedra, los que no lloran.
Yo nunca seré de piedra.
Lloraré cuando haga falta.
Lloraré cuando haga falta.
Lloraré cuando haga falta.
De piedra, los que no gritan.
De piedra, los que no ríen.
De piedra, los que no cantan.
Yo nunca seré de piedra.
gritaré cuando haga falta.
reiré cuando haga falta.
cantaré cuando haga falta.

Rafael Alberti

miércoles, 13 de junio de 2012

UN DÍA ESPECIAL

Hoy ha sido un día muy esperado ya que, por fín, hemos podido hacer la visita que llevábamos años esperando. ¡Mereció la pena porque todo ha salido fenomenal!. Aquí tenéis las fotos.

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domingo, 10 de junio de 2012

VOY A CONTAR UN CUENTO-MARÍA ELENA WALSH


Voy a contar un cuento.
A la una, a las dos
y a las tres:
Había una vez.
¿Cómo sigue después?
Ya sé, ya sé.
Había una casita,
una casita que.
Me olvidé.
Una casita blanca,
eso es,
donde vivía uno
que creo era el Marqués.
El Marqués era malo,
le pegó con un palo
a... No, el Marqués no fue.
Me equivoqué.
No importa. Sigo.
Un día llegó la policía.
No, porque no había.
Llegó nada más que él,
montado en un corcel
que andaba muy ligero.
Y había un jardinero
que era bueno pero.
Después pasaba algo
que no recuerdo bien.
Quizás pasaba el tren.
Pero lejos de allí,
la Reina en el Palacio
jugaba al ta te ti,
y dijo varias cosas
que no las entendí.
Y entonces...
Me perdí.
Ah, vino la Princesa
vestida de organdí.
Sí.
Vino la Princesa.
Seguro que era así.
La Reina preguntole,
no sé qué preguntó,
y la Princesa, triste,
le contestó que no.
Porque la Princesita
quería que el Marqués
se casara con ella
de una buena vez.
No, no, así no era,
era al revés.
La cuestión es que un día,
la Reina que venía
dio un paso para atrás.
No me acuerdo más.
Ah, sí, la Reina dijo:
-Hijita, ven acá.
Y entonces no sé quién.
Mejor que acabe ya.
Creo que a mí también
me llama mi mamá.